Existen algunas maneras de manejar la situación particular de vivir con un compañero de habitación, por eso te recomendamos que no dejes de leer este artículo en el que te orientamos con algunos consejos que te permitirán fomentar la buena relación.

Consejos para vivir con un compañero de habitación en la universidad

1. No esperes un mejor amigo el primer día: mira a tu compañero de habitación como alguien con quien llevarte bien, no como tu mejor amigo. Los estudiantes de primer año depositan demasiadas expectativas en la amistad del compañero de cuarto y a veces la situación no sale como se espera.  La idea es tener un compañero de cuarto bueno, no necesariamente genial, es decir, alguien con quien puedas vivir bien y que no interfiera en tus estudios.

2. Comienza la conversación lo antes posible: cuanto antes puedas comenzar la relación, mejor. Justo antes de empezar, procura programar una cita para conocerlo y establecer algunos límites. Si es posible, hazlo en persona. Incluso si seleccionaste a tu propio compañero de cuarto y ya los conoces bien, una cita previa es un paso necesario.

3. Discute las horas de alarma: intenta comparar los horarios de clases con tu compañero de habitación antes de que comience el semestre para ver si puede establecerse una dinámica para levantarse. Es posible que hayas tenido suerte con tu clases y que comiences  a las 10:00 a.m, pero es posible que tu compañero/a de habitación no haya tenido más remedio que coger clases a partir de las 8:30 a.m. Si tienes el sueño ligero, el despertador de tu compañero es una posible fuente de tensión…

4. Haz frente al ruido molesto: no hay forma de saber quién roncará o no. Tampoco sabrás si tu compañero/a habla demasiado fuerte o con demasiada frecuencia o por teléfono. Junto con los hábitos de estudio, debes analizar cómo gestionar las conversaciones telefónicas así como las visitas y otras tareas que impliquen molestos ruidos para alguno de los dos.

5. Evitar los malos olores: los olores malolientes pueden condenar cualquier relación de compañero de habitación. En primer lugar, indica si permites o no comer en la habitación y establece algunas reglas para el almacenamiento de alimentos… Más allá de eso, un poco de ambientador agradable funciona de maravilla (asegúrate de que tu compañero de cuarto no tiene alergias ni aversiones a olores particulares).

6. Etiqueta tus cosas:  Creo que a la gran mayoría de  personas no nos gusta que cojan nuestras cosas sin permiso, por eso es recomendable que etiquetes tus productos, comida y útiles escolares antes de mudarte.

Si desde el principio quieres que tus cosas no sean cogidas o usadas y tomas medidas, evitarás malos entendidos más adelante.

Esperamos que estos 6 consejos para vivir con un compañero de habitación en la universidad hayan sido útiles. ¿Tienes alguno más? ¡¡cuéntanoslo en los comentarios!!